A menos de dos semanas del estreno de la esperada tercera temporada, un error hizo que 10 capítulos del drama político estilo Shakespereano protagonizado por Kevin Spacey y Robin Wright aparecieran disponibles en Netflix, mandando al internet en un frenesí que duró alrededor de la media hora que le tomó a Netflix darse cuenta del error y quitarla.
La cuenta oficial de House of Cards no hizo esperar el control de daños:
Quien alcanzó a darle play a un capítulo dentro de la ventana de 30 minutos pudo terminarlo sin interrupciones, pero al parecer nadie pasó del primero, dado que un capítulo dura alrededor de 50 minutos y, sinceramente, ¿por qué habrían de verse en desorden?.
Ahora está la pregunta si el leak fue intencional o no. El Wall Street Journal reporta que un representante de Netflix les dijo que la razón oficial fue un glitch en el sistema, pero hay quien cree que fue una acción para que la gente empiece a hablar de House of Cards otra vez. Netflix se ha defendido diciendo que si quisieran empezar a generar expectativa hubieran simplemente lanzado un preview de la nueva temporada en lugar de orquestrar un leak accidental. La reacción de la gente fue evidente en las redes sociales, en especial Twitter, que corrieron la noticia como pólvora.
Haya sido una estrategia de marketing o no, Netflix gana de cualquier forma. Al final del día, ellos no requieren la aclamación de la crítica, o premieres al estilo de HBO, o siquiera que la gente vea House of Cards. Ellos lo único que requieren es que la cuota mensual de sus suscriptores. En fin, los seguidores de Underwood y compañía han sido tentados, y las expectativas están más altas que nunca. Lo malo es que después de este incidante, naturalmente, ahora el internet está lleno de spoilers. Navegue bajo su propio riesgo, sobre todo en sitios populares como Buzzfeed, The Huffington Post, y Mashable.
El presidente Underwood regresa a Netflix el 27 de febrero (ahora sí).
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